Visitas al Real Monasterio de San Victorián.

El Real Monasterio de San Victorián, uno de los monumentos más emblemáticos y queridos de Aragón, ubicado en el municipio de El Pueyo de Araguás (Huesca), continúa con su programa de visitas guiadas, que comenzó en abril y se extenderá hasta diciembre de 2024. Este monasterio, cuyo origen se remonta al menos al siglo VI y fue declarado Bien de Interés Cultural en 2002, es uno de los cinco panteones reales de Aragón, junto con los monasterios de Sijena, San Juan de la Peña y San Pedro el Viejo y el castillo de Montearagón.

Programa de Visitas Guiadas al Real Monasterio de San Victorián para 2024.

Gracias al convenio firmado entre el Gobierno de Aragón, la Sociedad de Promoción y Gestión del Turismo Aragonés (Turismo de Aragón), la Comarca de Sobrarbe y el Ayuntamiento de El Pueyo de Araguás, aragoneses y visitantes pueden disfrutar de estas visitas guiadas que buscan promover el valor histórico y artístico del monasterio y fomentar el turismo cultural en la región.

Durante agosto, el monasterio abre de martes a domingo con dos pases diarios, a las 11:00 y a las 13:00 horas. En septiembre, las visitas serán los sábados y domingos, mientras que en octubre y noviembre se realizarán solo los domingos. En diciembre, las visitas serán los días 1, 7 y 8.

El precio de entrada es de 3 euros y 1,5 euros para niños entre 8 y 12 años. Además, se llevan a cabo actividades complementarias como el Taller de Caligrafía Antigua, impartido por Ricardo Vicente Placed el pasado 12 de agosto, que tuvo una excelente acogida.


Obras de restauración.

En las últimas dos décadas, el Gobierno de Aragón ha invertido más de un millón de euros en el monasterio. En esta ocasión, el departamento de Presidencia, Interior y Cultura del Gobierno de Aragón ha destinado una inversión de 633.000 euros, financiada en su totalidad por los fondos europeos del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia impulsado por el Gobierno de España, para continuar con la restauración del monasterio con el proyecto de "Recalce de Cimentación y Consolidación Estructural" en el ámbito Sur del Monasterio de San Victorián.

El proyecto incluye una serie de intervenciones para reforzar la cimentación y estabilizar los muros de piedra en la zona sur, con el objetivo de, en etapas posteriores, restaurar el Palacio Abacial. Los trabajos preliminares, realizados entre finales de 2022 y principios de 2023, incluyeron desbroce y limpieza, revelando áreas destinadas a horno y molino, y evidenciando el deterioro de los muros. La solución propuesta implica la inyección de mortero en el terreno para detener los asentamientos, permitiendo así la posterior consolidación estructural y la rehabilitación de las paredes.

Digitalización 3D

Este año, el Ayuntamiento de El Pueyo de Araguás ha recibido una ayuda de cooperación transfronteriza entre la Comunidad Autónoma de Aragón y la región francesa de Nueva Aquitania para la digitalización 3D del Real Monasterio de San Victorián.

Este proyecto será llevado a cabo por el Lycée de Sillac de Angoulême, en Nueva Aquitania, especializado en topografía y modelización digital. Utilizarán técnicas avanzadas como el escaneado 3D, la fotogrametría y el posicionamiento por satélite para crear modelos tridimensionales del monumento, que serán valiosos para su difusión, investigación y conservación.

Este proyecto es la cuarta acción de cooperación transfronteriza entre Aragón y Nueva Aquitania, con el Lycée de Sillac. En esta ocasión, el Ayuntamiento de El Pueyo de Araguás es el socio español en esta iniciativa. Todos los datos y documentos generados se entregarán al Gobierno de Aragón para su uso futuro.

Uno de los monasterios más antiguos de la Península Ibérica

Con relación al Monasterio de San Martín de Asán o asanense, conocido posteriormente como Monasterio de San Victorián, se conservan documentos emitidos desde el año 522. Este cenobio, ubicado en Sobrarbe, adopta su nombre actual en honor a su abad más destacado, San Victorián, aunque no es hasta el siglo X cuando aparece citado con esta denominación. Anteriormente, encontramos seis documentos del siglo VI que afectan directamente al monasterio, cuatro de los cuales son relativos a donaciones y testamentos de monjes asanenses que terminaron ocupando sedes episcopales, como el obispo Vicente de Huesca, y otros dos son concesiones directas de la monarquía visigoda al monasterio o a alguno de sus miembros.

Los del obispo Vicente eran conocidos desde hace tiempo  gracias a copias conservadas en los primeros folios de la Biblia de la Catedral, pero en 2017, los investigadores José Carlos Martín-Iglesias y Guillermo Tomás-Faci publicaron en la revista alemana Mittellateinisches Jahrbuch cuatro documentos inéditos del Monasterio de San Martín de Asán, que abarcan el periodo entre los años 522 y 586. Estos documentos complementan y refuerzan los ya conocidos, formando un corpus documental clave para entender la historia del monasterio visigodo de Asán. El documento más antiguo, datado en 522, es el más antiguo conservado de un monasterio en la Península Ibérica.

Este hallazgo motivó la organización de unas jornadas de estudio en Burdeos en 2019, que resultaron en la publicación de la monografía Nouvelles chartes visigothiques du monastère pyrénéen d'Asán en 2021. En este trabajo, investigadores de diversas universidades europeas y estadounidenses analizaron la relevancia de los documentos hallados.

Las conclusiones de estos estudios son reveladoras. En primer lugar, confirman que el Monasterio de San Martín de Asán existía en el siglo VI y que, muy probablemente, estaba ubicado en el territorio de Sobrarbe, bajo el actual Monasterio de San Victorián o en sus alrededores, como indica la abundancia de topónimos citados que corresponden con núcleos y enclaves sobrarbenses. Las investigaciones arqueológicas futuras podrán confirmar esta teoría. Además, se verifica que el monasterio ya estaba en pleno funcionamiento con anterioridad al año 522, según el documento más antiguo conservado del lugar.

Estos documentos también revelan el uso de la fórmula "don pro anima", una práctica que permitía la donación de bienes para la salvación del alma y cuyas referencias más tempranas, hasta la aparición de estos documentos, eran de finales del s. VI en Rávena, estos diplomas retrotraen la constatación documental de esta práctica en más de medio siglo, siendo los documentos asanenses, a día de hoy, los más antiguos de la Cristiandad en los que aparece esta fórmula.

Otra conclusión relevante es que San Victorián, figura clave de la tradición religiosa aragonesa, fue abad del monasterio de Asán, corroborando la información transmitida por la tradición oral sobre su liderazgo en el cenobio. Además, los documentos confirman el apoyo de la monarquía visigoda al monasterio, especialmente por parte de los reyes Leovigildo y Recaredo, quienes aparecen como benefactores en los textos. Este patrocinio se enmarca en la estrategia de los visigodos para consolidar su poder en la península ibérica durante los primeros momentos del Reino Visigodo de Toledo.

Finalmente, se destaca el papel del monasterio como centro formativo para futuros obispos visigodos, que luego ocuparían importantes sedes eclesiásticas, como Aquilino en Narbona, Vicente en Huesca y Gaudioso en Tarazona. Esto subraya la influencia del Monasterio de San Martín de Asán en la expansión del cristianismo visigodo en territorio peninsular desde el otro lado de los Pirineos.

Completa la visita conociendo los pueblos que rodean al monasterio

El monasterio fue el centro político, económico y espiritual de un vasto territorio que incluía parte de las comarcas aragonesas de Sobrarbe y Ribagorza. Durante siglos, administró numerosos cenobios y fue fundamental en la historia de Aragón. Aunque hoy desacralizado, sigue siendo un referente cultural e histórico.

Después de disfrutar de la visita guiada a San Victorián, atrévete a continuar tu recorrido explorando los encantadores pueblos que se extienden bajo la imponente Peña Montañesa. Estas localidades, estrechamente vinculadas al monasterio, conservan su autenticidad, ofreciéndote una experiencia única de historia, paisajes y tradiciones.

El Pueyo de Araguás, cabecera municipal, destaca por su carácter medieval y su iglesia que guarda un retablo de San Victorián. También son notables la Casa Coronas y las ermitas de Santa Ana y Santa Engracia. Cerca se encuentran El Soto, La Pardina y La Caixigosa, con excelentes muestras de arquitectura tradicional. En Araguás, destaca la iglesia de la Asunción y la casa torre de El Arrendador (BIC). San Lorién ofrece vistas impresionantes y una iglesia románica de estilo lombardo. Los Molinos, La Muera, Oncins, El Plano y Torrelisa conservan retablos, una sobresaliente arquitectura tradicional y hermosos paisajes rurales, con restaurantes en algunos de ellos para disfrutar de la gastronomía local.



Disfruta de la excursión hasta la ermita de La Espelunga, en la cueva donde vivió San Victorián.

Esta ruta fácil y fascinante te llevará a uno de los enclaves más icónicos de Sobrarbe, donde historia, leyenda y naturaleza se entrelazan para ofrecerte una experiencia única. Partiendo del Monasterio de San Victorián, te adentrarás en un paisaje impresionante hasta llegar a la Ermita de la Espelunga, ubicada en una cueva natural en la falda de la Peña Montañesa, donde vivió como eremita San Victorián en el siglo VI, hasta que fue reclamado por los monjes del monasterio para convertirse en su abad.

El recorrido es lineal, de ida y vuelta, con una distancia total de 5 kilómetros y una duración aproximada de 2,5 horas. El desnivel es de 280 metros y la dificultad es baja, aunque hay que tener precaución en el tramo más próximo a la cueva donde el terreno puede ser algo resbaladizo.

Esta ruta, señalizada como Geo Ruta nº15 del Geoparque Mundial UNESCO Sobrarbe-Pirineos, como parte del PR-HU-43 y como ruta ornitológica, es perfecta para disfrutar de un entorno natural espectacular, comprender la interesante geología que define el impresionante relieve de la Peña Montañesa y conocer más sobre la historia y leyendas del lugar, mientras se disfruta de la naturaleza en estado puro.